Tazones es un pueblo marinero que podemos visitar cerca de Villaviciosa en Asturias.
Característico por sus calles empedradas y sus casas bajas, abierto al mar y con unas vistas espectaculares. Sus casas con fachadas blancas con balcones y ventanas coloridas, reflejan la luz en los días de sol.
Desde Villaviciosa llegamos a Tazones tomando la carretera local pegada a la ria. Al avanzar, desde las alturas podemos contemplar la playa de Rodiles, y desde ese punto comenzamos nuestro descenso hasta Tazones. La gran cantidad de vegetación parece cerrarnos el paso hasta que alcanzamos el nivel del mar y descubrimos el pueblo, con playa incluida.
Existe una gran oferta de restaurantes y sidrerías donde poder saborear ricos mariscos y pescados autóctonos.
Entre las construcciones llamativas del pueblo sorprende, no tanto por su historia sino por su inventiva, una casa cargada de conchas, que muestra la unión entre Tazones y el mar, y el esfuerzo de una familia marinera enamorada del Cantábrico y de los moluscos.
También podemos encontrar uno de los más importantes yacimientos de huellas de dinosaurios de toda Europa, una aportación generosa a la cada vez más popular costa jurásica asturiana.
Acercarse a Tazones es un buen plan y una buena forma de emplear el tiempo libre. La vista se disfruta, se come bien, el mar inmediato nos relaja y hay motivos suficientes como para no quedarse sentado un tiempo excesivo, caminar y dejar nuestras huellas anónimas como un buen día dejaron Carlos V o los dinosaurios.
Aquí os dejo unas cuantas fotos, para que disfrutéis del paisaje y comprobéis que es un sitio precioso que visitar cualquier fin de semana.
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